miércoles

"Las únicas mujeres con las que vale la pena casarse son aquellas en las que uno no puede confiar para casarse." (Cesare Pavese, El oficio de vivir)

La psicóloga me aseguró que es mamá la tiene la culpa de que yo piense como Pavese, en cierta forma de resistencia (quizás exagerada) a aquel futuro susanitesco plagado de "buenos partidos" y "muchachos educados". Pero eso no implica que, sin admitirlo, siga esperando al príncipe azul que baje desde el cielo en un caballo con alas para salvarme de la desventura.

viernes

La gloriosa juventud argentina

En diversas paredes del Microcentro aparecieron unos stencils (se renovaron en serio, ¿eh? Ahora los locos hacen “intervenciones urbanas”) de la Juventud Radical que dicen “Somos el juicio a las Juntas”. Me pregunto si no les da (a ellos) un poquitito, aunque sea un poquitito de vergüenza.
P.S: Además, no puedo evitar imaginarme un Comando Stencil ¡de radicales! Bufonesco.

domingo

Crónicas subterráneas

Prometo suspender por un tiempo los relatos citadinos, pero a más de uno debo haberle parecido una alienada fotografiando los túneles desde el borde del andén, vagando durante dos horas de Perú a Castro Barros y de Loria a Plaza Miserere, con la cámara en la mano y una sonrisa perdida frente a la perspectiva desde el primer vagón, la misma del piloto de esas perfectas máquinas de madera y metal. Iba sentada al lado de dos niños, alucinados como yo con la maraña de rieles, los cableados arcaicos, las chispas de electricidad colérica a la velocidad violeta del disparo, dos, tres, cinco veces, al azar de las sombras; al fondo de aquella vía muerta que conduce a nadie sabe dónde.

martes

Desde la ventanilla

Supongo no ser la única a la cual pone de malhumor viajar hasta Ciudad Universitaria para hacer un miserable trámite administrativo. Pero todo puede darse vuelta al retorno si se toma el 45 que va por Costanera, bordeando el río lila, y el día está nublado, y acelera por la única calle con número de la ciudad, las grúas y los contenedores del puerto en una especie de regresión infantil (me gustaba jugar al constructor), tránsito de camiones con remolque, quién fue el culpable de diseñar los tribunales de Retiro y ese rosario de edificios funcionales, crímenes públicos a plena luz del día, útiles y espantosos al mismo tiempo; el cemento de la estación parece verde en contraste con el cielo, en el reflejo punzante de los hoteles vidriados. Reconquista derecho, Maipú y Corrientes y me bajo, se pronostican lluvias para las próximas horas.

jueves

Según pasan los años

Chiche Gelblung dijo haber sido comunista en su juventud. Gerardo Sofovich, socialista.
Tengo miedo. Miedo de envejecer y ser como Chiche y Gerardo.